En mayo, Playa Azul se llena de formas y colores con el Festival Costero del Papalote. Además de los papalotes gigantes operados por profesionales; niños, jóvenes y adultos participan en el vuelo de otros papalotes de distintos tamaños, algunos de ellos verdaderas piezas de arte en movimiento.

La jornada se complementa con talleres, presentaciones artísticas y espacios para el encuentro comunitario. La playa se convierte en un espacio compartido donde se mezclan la creatividad, la tradición y la alegría de convivir al aire libre. Con el tiempo, este festival ha dejado de ser solo una exhibición visual para convertirse en un referente cultural que atrae tanto a familias locales como a visitantes que buscan experiencias auténticas en el litoral de Manzanillo.